La atención obstétrica humanizada ha venido abriéndose camino a nivel mundial, esto ha despertado el interés creciente de algunos sectores en Latinoamérica. Brasil es uno de los pioneros en nuestra región en el estudio de este enfoque que evidencia una deficiencia en el conocimiento que poseen los profesionales en salud sobre la violencia obstétrica y la atención humanizada. En Colombia, poco a poco se han venido realizando estudios que evidencian las fortalezas que algunas Instituciones Prestadoras de Salud (IPS) poseen sobre humanización obstétrica y de igual forma prueba las falencias que pueden tener incluyendo el personal encargado de la atención en estas.

Cuando se habla de atención obstétrica humanizada, se debe tener en cuenta las tres grandes etapas de la gestación: prenatal, parto y puerperio. Muchos de los estudios realizados a nivel Latinoamericano se centran en el parto y puerperio, pero la humanización en la atención prenatal, basándose en la educación, juegan un papel importante en el feliz término del embarazo. En tiempos de COVID-19 y las múltiples estrategias definidas por los gobiernos nacionales y locales, los profesionales en salud juegan un papel mayor en la educación dada a la gestante y a su pareja ya sea de manera presencial o por teleconsulta.

En la atención de la consulta prenatal, se toma la educación como el pilar de la humanización. Guiar a la futura madre en lo que se debe hacer y lo que no durante la gestación, el conocimiento sobre los derechos y los deberes que cada uno tiene, resolver las dudas que puedan aquejar el bienestar mental y físico de los pacientes es fundamental y dependerá en gran medida del éxito en la consecución y mantenimiento de una adecuada y confiable relación médico-paciente.

La empatía que hay entre el personal de salud y los pacientes abre la puerta para que todo el proceso de la gestación sea una experiencia de aprendizaje, segura y agradable. Al crear un entorno de confianza recíproca, se puede acceder a información importante que, por creencias o no considerar trascendente, no llegan a informarle a los profesionales. Esto podría llevar a los pacientes a que resuelvan sus inquietudes con personas poco idóneas para dicha labor.

En algunas ocasiones el acceso a los servicios de salud es limitado y condicionado a factores como calidad en los servicios, factores socioeconómicos, familiares, culturales o demográficos. Por esta misma razón, las IPS se encuentran trabajando cada vez más en servicios amigables enfocados en atención humanizada a la gestante con el fin de poder tener un contacto más estrecho con los usuarios y su núcleo familiar y así, poder incentivar la adherencia a los controles prenatales.

Jairo A Jimeno-Orozco

Médico – U. de Cartagena

Candidato a Magister en Salud Sexual y Reproductiva

Universidad El Bosque

Santiago Prieto Rojas

Médico – U. de La Sabana

Candidato a Magister en Salud Sexual y Reproductiva

Universidad El Bosque